Neumonía, un enemigo al acecho

Share on whatsapp
Share on facebook
Share on twitter
Share on email

La enfermedad respiratoria bovina es considerada como la enfermedad que mayor pérdida económica genera en la actividad ganadera. No solamente por el impacto directo que puede causar la muerte del animal en sí, sino, también, por las consecuencias que genera.

Fuente: InfoSudoeste

“Por ejemplo, un animal con neumonía va a tener una tasa de conversión de alimento muchísimo inferior. Es ese típico ternero que vemos que se va quedando y no engorda. Inclusive, la calidad de la carcaza al momento de la faena de ese animal también será de menor calidad en comparación con uno sano. A esto también debemos sumarle los gastos de medicamentos veterinarios y diagnósticos”, explicó el Dr. Ignacio Álvarez.

¿Cuáles son los factores predisponentes de esta enfermedad?

-Debemos entender que la neumonía es una enfermedad multifactorial. Con esto quiero decir que son muchas cosas las que entran en juego para que se presente y las que debemos manejar también para prevenir la enfermedad.

En otros programas hablamos sobre el concepto del preacondicionamiento de terneros, el cual se basa en generar una buena inmunidad y el menor stress posible, con el objetivo de evitar enfermedades.

Una de ellas es la enfermedad respiratoria, entonces todas aquellas maniobras que generen stress como el encierro a corral, cambios bruscos en las dietas, la castración o traslados en camiones, la amplitud térmica que tenemos en otoño con días calurosos y noches frías y el estado nutricional e inmunológico de cada animal, son predisponentes en mayor o menor medida y serán los que como productor vamos a tener que manejar para prevenir la enfermedad.

¿Cómo prevenimos?

-No hay una receta fija para todo, no va a ser lo mismo la recomendación para un tambo o establecimiento que hace destete precoz que para un destete de ocho meses, una recría a campo o uno que compra terneros para feedlot.

Cada uno tendrá que trabajar con su veterinario en medidas preventivas específicas para cada caso que se van a basar principalmente en disminuir al máximo las situaciones predisponentes que mencionamos antes y en generar la máxima inmunidad posible a través de un plan sanitario específico para cada establecimiento.

Por ejemplo, en el caso del destete precoz, tener una vacunación en las madres preparto, mientras que en un feedlot podemos pensar en realizar vacunación con tratamiento metafiláctico al ingreso de los terneros.

¿Quién causa la neumonía y cómo nos damos cuenta que estamos frente a esta enfermedad?

-Hay varias causas, pero el caso de la neumonía clásica se puede dividir en dos grandes grupos, es decir, en aquellas producidas por bacterias y por virus.

Muchos de estos virus o bacterias pueden generar la neumonía por sí sola o en forma conjunta, lo que sería virus más bacteria.

En general al comienzo de las enfermedades vamos a ver animales con orejas caídas, deprimidos, apartados y con más de 40 grados de fiebre. Posteriormente se pueden observar terneros con la cabeza extendida, la legua afuera, abundante mucosidad y una respiración más abdominal.

En todos los casos debemos llamar a los veterinarios para que nos haga las recomendaciones del caso. En tal sentido, lo correcto es que el veterinario vaya hasta el campo y realice la confirmación de la enfermedad, ya sea por la sintomatología clínica o a través de una necropsia.

Si se puede hacer una necropsia sería importante intentar hacer un aislamiento de la bacteria que está causando la neumonía para evaluar si tenemos resistencia o no a los antibióticos que estamos utilizando.

Es importante saber que hay mucha resistencia a los antibióticos y esto no es algo ajeno a la zona, ya que tenemos registros de resistencias.

También es significativo recordar que al momento de hacer la necropsia que solo el cambio de coloración en el pulmón no es indicativo de neumonía. Si bien hay muchos patrones de lesión, el cambio de coloración siempre debe ir con un aumento de la consistencia del pulmón.

Tenemos los factores, la prevención y las causas, nos faltaría saber más sobre los tratamientos, una parte que el productor obviamente debe consultar con su profesional veterinario.

-La clave en los tratamientos está en la detección temprana y en el aislamiento del animal enfermo. Las recorridas diarias son fundamentales y en caso de que estemos pasando por un brote deberíamos hacer dos recorridas diarias del lote afectado.

Los antibióticos que nos haya recomendado el veterinario deberían ser de marcas reconocidas, de buena calidad y deberían ser aplicadas siempre en conjunto con un antinflamatorio no esteroide, lo cuales contribuyen mucho a tener buenos resultados de tratamiento. En tal sentido, una buena costumbre es marcar los animales tratados para evaluar su evolución.

Otra cosa que es común de ver es la decisión de vacunar cuando se detectan cuadros respiratorios. Tengamos en cuenta que esta necesidad de hacer algo no va a contribuir a solucionar el problema, va a generar un importante gasto con poco efecto.

Entonces, vamos a vacunar ante un brote a aquellos lotes que no tengan problemas y que no hayan sido vacunados, pero en el caso de que estemos pasando por un brote de neumonía, a ese brote especifico la verdad que no vale la pena vacunar. Concentremos la plata y el esfuerzo en el tratamiento.

¿Las vacunas sirven o no?

-Las vacunas sirven, pero no son milagrosas. A veces solemos sobrevalorar la utilización de la vacuna respiratoria.

Lo que nos va a aportar una correcta vacunación es a tener menos animales enfermos y lesiones menos severas en comparación con no tener vacunación.

Cuando digo correcta vacunación me refiero a doble dosis con intervalos de aproximadamente 20 días para generar una correcta respuesta inmunitaria.

Vuelvo a repetir, no debería buscarse la respuesta al control de las enfermedades respiratorias solamente en un frasco y en una jeringa, sino en tratar de hacer un manejo más integral de varios factores.

Para cerrar con esto, y para que el productor también lo entienda, muchas veces las medidas preventivas y de control que hay contra el Coronavirus, como ejemplo de enfermedad respiratoria, son totalmente aplicables a las neumonías del bovino. Es decir, la rápida detección y el aislamiento del enfermo, evitar el ingreso de enfermos, el inicio rápido de los tratamientos, la utilización de tratamientos aprobados y efectivos, evitar situaciones de stress que comprometan al sistema inmune, evitar aglomeraciones, correcta nutrición, confirmación de diagnóstico, la importancia de la doble vacunación y demás.

Son conceptos básicos que podemos utilizar para entender la enfermedad y aplicar en el campo.

Repito, son solo conceptos, no hay que pensar que la dosis única de la neumonía de los terneros tiene el mismo efecto que la dosis única de Covid-19 porque no está ni cerca. Sí es fundamental que entendamos como productor que la neumonía en un ternero no se va a solucionar con una receta única y que la prevención es más importante que el tratamiento.

Seguir leyendo otras noticias